La neuropatía periférica, el resultado de una lesión de los nervios periféricos, a menudo provoca debilidad, entumecimiento o insensibilidad y dolor, por lo general en las manos y en los pies. También puede afectar otras partes del cuerpo. El sistema nervioso periférico envía información del cerebro y de la médula espinal (sistema nervioso central) al resto del cuerpo. La neuropatía periférica puede deberse a lesiones traumáticas, infecciones, problemas del metabolismo, causas heredadas y exposición a toxinas. Una de las causas más frecuentes es la diabetes mellitus. Las personas con neuropatía periférica generalmente describen el dolor como un dolor punzante, un escozor o ardor, o un hormigueo. En muchos casos, los síntomas mejoran, en especial si se deben a una afección que puede tratarse. Cada nervio del sistema nervioso periférico tiene una función específica; por lo tanto, el tipo de nervio afectado determinará el síntoma que se experimente. La clasificación de los nervios se da en los siguientes niveles: Nervios sensitivos: se encargan de percibir las sensaciones, como la temperatura, el dolor, la vibración o el tacto, desde la periferia (piel). Nervios motores: se encargan de controlar los movimientos musculares. Nervios autónomos: se encargan de controlar funciones como la presión arterial, la frecuencia cardíaca, la digestión y la vejiga. Entre los signos y síntomas de la neuropatía periférica se pueden incluir los siguientes: aparición gradual de entumecimiento, cosquilleo u hormigueo en los pies o las manos, que pueden extenderse hacia arriba y afectar las piernas y los brazos; dolor intenso, punzante, pulsátil; sensación de congelación o de quemazón; sensibilidad extrema al tacto; pérdida de la coordinación y caídas y debilidad o parálisis muscular si se ven afectados los nervios motores Si se ven afectados los nervios autónomos, los signos y síntomas pueden ser los siguientes: intolerancia al calor o alteraciones de la sudoración, problemas de los intestinos, la vejiga o el sistema digestivo y cambios en la presión arterial que causan mareos y aturdimiento La neuropatía periférica puede afectar a un solo nervio (mononeuropatía), a dos o más nervios en distintas zonas (monoteuropatía múltiple) o a muchos nervios (polineuropatía). El síndrome del túnel carpiano es un ejemplo de mononeuropatía. La mayoría de las personas con neuropatía periférica desarrollan polineuropatía. La BIOTINA también llamada Vitamina B7 o vitamina H, tiene un papel muy importante en el metabolismo de los hidratos de carbono, proteínas y grasas, se almacena en hígado y riñón. Participa en el funcionamiento del sistema endocrino, la sangre y otros órganos vitales.
Es absorbida por el intestino, con lo cual una buena dieta que aporte alimentos ricos en biotina es la forma más adecuada de aportar al organismo de esta vitamina. Sino, siempre nos queda la alternativa de la suplementación.
(Fuente: https://www.enbuenasmanos.com/propiedades-de-la-biotina)
AZÚCAR DE CAÑA
GLUCOSA
ESPINACA-HOJAS (Spinacia oleracea L.)
BETABEL-RAíZ (Beta vulgaris L.)
ACEITE DE SEMILLA DE UVA (Vitis vinifera subsp. Vinifera L.)
ACEITE DE PRíMULA (Oenothera speciosa Nutt.(1)
FLOR CóNICA DE LA PRADERA-RAíZ (Echinacea paradoxa (J.B.S. Norton) Britt.)
JALEA REAL
PROTEíNA DE SOYA
VITAMINA A (Retinol)
VITAMINA C (ácido Ascórbico)
VITAMINA D (Calciferol)
VITAMINA E (Tocoferol)
VITAMINA B1 (Tiamina)
VITAMINA B2 (Riboflavina)
NIACINAMIDA
VITAMINA B6 (Piridoxina)
áCIDO FóLICO
VITAMINA B12 (Cobalamina)
EXTRACTOS VEGETALES DE:
GATUñA-RAíZ (Ononis spinosa, L.)
ZANAHORIA BASTARDA-RAíZ (Echinophora spinosa, L.)
TOMATERA-PLANTA (Solanum lycopersicum, L.)
VERBENA COMúN-HOJAS (Verbena officinalis, L.)
CREATINA MONOHIDRATE
VITAMINA C
COMPLEJO B
FOSFATO MAGNESIO
FOSFATO DE POTASIO
FOSFATO DE SODIO
TAURINA
DEXTROSA
áCIDO CíTRICO
TORONJA DESHIDRATADA EN POLVO (Citrus x paradisi Macfad)