La púrpura es un problema raro que provoca la aparición de manchas rojas en la piel, que no desaparecen cuando se presionan, y que son causadas por la acumulación de sangre debajo de la piel debido a la inflamación de los vasos sanguíneos. Generalmente, la púrpura es más frecuente en los niños, pero puede surgir a cualquier edad, especialmente dependiendo de su causa.
Existen diversos tipos de púrpura de acuerdo a la causa que la genera, estas son:
Púrpura de Henóch-Schónlein: es el tipo más común de niños menores de 10 años con aparición de manchas rojas, principalmente en las piernas y glúteos, pudiendo causar dolor en las articulaciones o en el abdomen
Púrpura trombocitopénica idiopática: provoca disminución del número de plaquetas en la sangre, que causa síntomas como grandes manchas en la piel y sangrado por la nariz
Púrpura trombocitopénica trombótica: es un tipo raro de púrpura, más frecuente entre los 20 y los 40 años, que puede ser muy grave si no se trata lo más rápido posible, provocando anemia, disminución de las plaquetas, y alteraciones neurológicas
Púrpura fulminante: surge principalmente en el recién nacido debido a la falta de proteínas de la coagulación, provocando la formación de coágulos en los vasos que pueden dificultar la circulación de la sangre. Las manchas rojas pueden tornarse negras debido a la muerte celular de la piel en esos lugares
Púrpura senil: muy frecuente en los ancianos y se caracteriza por la aparición de manchas rojas debido al envejecimiento de la piel. No hay tratamiento para este tipo de púrpura, pero se pueden utilizar cremas con vitamina K para reducir el problema.
Dependiendo del tipo de púrpura, la enfermedad tiene cura, se recomienda consultar un dermatólogo para identificar cuál es el tipo e iniciar el tratamiento adecuado.
La "VID ROJA" (Vitis viniferol subsp. Vinifera) en su composición química destacan polifenoles como los flanovoides, taninos y antocianos, con gran poder antioxidante y vosoprotector, ácidos orgánicos, sales minerales, lípidos, tocoferol y vitamina C. Las hojas son la parte de la vid que tradicionalmente se viene usando con propiedades terapéuticas, ya sea por vía interna o externa.
Básicamente la vid roja se usa para tratar problemas del sistema circulatorio aunque también tiene una destacable acción antioxidante y antiradicales libres. Es un venotónico y vasoprotector, lo que quiere decir que aumenta la resistencia capilar y disminuye la permeabilidad de las venas. Está indicada en caso de sufrir
varices, hemorroides, flebitis, reglas demasiado abundantes, alivia la insuficiencia venosa y la fragilidad capilar cutánea.
posee propiedades antiagregantes y vasodilatadoras al aumentar el tamaño de las arterias y capilares y facilitar el paso de la sangre.
(Fuente: ww.botanical-online.com/medicinalsvidroja.htm)