El síndrome de congestión pélvica parece ser una causa habitual de dolor pélvico crónico (dolor que dura más de 6 meses). El dolor se produce porque se acumula sangre en las venas de la pelvis, que se han dilatado y se han vuelto tortuosas (varices o venas varicosas). El dolor resultante a veces es debilitante. Los estrógenos pueden contribuir a la aparición de estas venas. Hasta un 15% de las mujeres en edad fértil tienen varices pélvicas, aunque no todas presentan síntomas. En ocasiones, el dolor que aparece antes o durante los periodos menstruales está causado por el síndrome de congestión pélvica.
Por lo general, el dolor es un malestar sordo, aunque a veces puede ser agudo o punzante. Este dolor empeora al final del día (después de haber estado sentada o de pie durante largo tiempo) y se alivia al tumbarse. También empeora durante o después del coito. A menudo se acompaña de dolor en la parte baja de la espalda, molestias en las piernas y sangrado vaginal anómalo. En ocasiones, algunas mujeres presentan una secreción vaginal transparente o acuosa. Otros síntomas incluyen cansancio, cambios de humor, cefaleas e hinchazón abdominal.
El "HAMAMELIS" (Hamamelis virginiana), tiene una gran cantidad de taninos y flavonoides, lo que estimula la circulación en la piel y también es muy adecuada para tratar casos de hemorroides, varices, flebitis e incluso para el dolor de piernas por la falta de la circulación. se ha utilizado por su alto poder descongestionante, astringente y vasoconstrictor en las hojas y la corteza. Como resultado, actúa sobre la circulación y los poros, desatascando venas, vasos capilares y facilitando el flujo sanguíneo.
(Fuente: http://revistaalcorac.es/tsfc2007/MNHAMAMELIS.htm)
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