El uso del eucalipto como planta medicinal es relativamente reciente, ya que data del siglo XVIII. Principalmente, está recomendado para aquellas enfermedades que afectan a las vías respiratorias como son, entre otras, la gripe, el asma o los catarros.Para las aplicaciones medicinales que posee este árbol, se utilizan, sobre todo, las hojas de la especie globulus, por poseer tres importantes propiedades: son antiinflamatorias, antimicrobianas y expectorantes.En el caso de la primera, al reducir la inflamación, facilita la respiración.Respecto a su capacidad antimicrobiana, con su uso se consigue acabar con aquellos microorganismos -principalmente microbios y bacterias- que son los causantes de procesos infecciosos en las vías respiratorias como son la bronquitis, la sinusitis, la traqueítis y los constipados.Sus propiedades expectorantes proceden de las hojas del eucalipto. Son muy olorosas y ricas en un aceite esencial cuyo principal componente es el eucaliptol. Dicho componente es un potente mucolítico que fluidifica las secreciones pulmonares y favorece la expulsión de las mismas. A su vez, es antitusivo y un inhibidor de la irritación bronquial, por lo que se recomienda su aplicación en enfermedades tales como la bronquitis aguda y crónica.
LECITINA DE SOYA
ACEITE DE SOYA (Glycine max L.)
VITAMINA A+D3
VITAMINA B1 (Tiamina)
VITAMINA B2 (Riboflavina)
VITAMINA B6 (Piridoxina)
VITAMINA C (Acido Ascórbico)
VITAMINA E (Tocoferol)
GRASA MINERAL
ACEITE DE ALCANFOR
ACEITE DE SALOL
GOMA DE ESTORAQUE (Liquidambar styraciflua)
ACEITE DE YERBA DE LA ABEJA (Ophrys apifera Huds.)
ACEITE DE YERBA DE LA VíBORA (Echium vulgare L.)