El 80% de las infecciones urinarias en las mujeres se origina a causa de las relaciones sexuales. Un porcentaje elevado que se debe a la anatomía del tracto urinario femenino. Se calcula que la mitad de las mujeres sufre o sufrirá una infección urinaria al menos una vez en su vida, y que el 30 % de estas infecciones son de repetición (es decir, más de dos en un año).
La mayor frecuencia de la cistitis en mujeres se debe principalmente a las características del aparato urinario femenino, y más concretamente, a la cercanía entre el meato urinario próximo a la vagina y el ano, y a una uretra muy corta en comparación con la de los hombres.
La causa principal por la que se produce un alto porcentaje de infecciones urinarias tras las relaciones sexuales se debe a que durante el coito se facilita la entrada pasiva de gérmenes a la vejiga, lo que provoca la infección.
Durante el coito, la uretra es comprimida y su contenido puede ir hacia la vejiga de fácilmente. Otra causa es el barrido de bacterias que se puede ocasionar de manera desintencionada desde el ano a la vagina a través de los dedos, el pene o la lengua durante las relaciones sexuales.
Los principales síntomas que alertan de una infección de orina son los siguientes: -Ardor, dolor o molestia al orinar. -Necesidad urgente de ir al baño a orinar.-Necesidad de orinar con mucha frecuencia.-Orina turbia, maloliente o con sangre.-Dolor lumbar.-Fiebre o sensación de frío y calor en el cuerpo.
La bacteria E. coli (Escherichia coli), que se encuentra normalmente en el intestino, es una de las principales causantes. Estas bacterias se eliminan mediante la orina pero, cuando no se orina lo suficiente o las bacterias se multiplican demasiado rápido, se produce la infección.
El "PRóPOLEO DE ABEJAS" es activo frente a los microorganismos patógenos más frecuentes (Salmonella, Shigella, Staphylococcus aureus, Streptococcus-hemolítico, Bacillus subtilis, Pseudomonas aeruginosa, Proteus vulgaris, Escherichia coli, etc.), incluso frente a alguno resistente a los antibióticos (Streptococcus piogenes).
Este efecto lo ejercen fundamentalmente flavonoides, como la galangina y la pinocembrina, y ácidos fenólicos, ácido cafeico y ferúlico, presentes en él. Es capaz de inhibir tanto el crecimiento de hongos (Candida albicans y Tricophyton verrucosa) como de algunos protozoos (Trichomonas vaginalis, Giardia lamblia, Trypanosoma cruzi, etc...)
Su composición y consistencia es muy variable, dependiendo de la especie vegetal de la que proceda, del clima y de la técnica de recolección escogida. En el PROPÓLEO se han aislado más de 250 compuestos y aún quedan muchos por descubrir.
Por su actividad antibacteriana, antifúngica, antiprotozoaria, regeneradora de tejidos y cicatrizante, es muy efectivo en infecciones de vías urinarias y vejiga (cistitis, uretritis, etc.), prostatitis, vaginitis y candidiasis.
El "ALGA CLORELA" disminuye notoriamente la reproducción de virus patógenos y de bacterias, y el crecimiento de la división de las células, antes tumores de naturaleza diversa, tanto benignos como malignos.
(Fuente: https://www.superalimentos24.com/chlorella/)
LECITINA DE SOYA
ACEITE DE SOYA (Glycine max L.)
VITAMINA A+D3
VITAMINA B1 (Tiamina)
VITAMINA B2 (Riboflavina)
VITAMINA B6 (Piridoxina)
VITAMINA C (Acido Ascórbico)
VITAMINA E (Tocoferol)
EXTRACTOS VEGETALES DE:
MILENRAMA-PLANTA (Achillea millefolium, L. 1753)
NOGAL DE CASTILLA-HOJAS (Juglans rigia, L.)
ORTIGA BLANCA-PLANTA (Urera caracasana (Jacq.) Gaud.ex Griseb)
MELISSA -PLANTA (Melisa officinalis, L.)
MALVA -FLOR (Malva sylvestris, L.)
ENCINO-CORTEZA (Quercus rubra, L.)
CALéNDULA-FLOR (Calendula officinalis, L.)